Sobre las cenizas del volcán islandés: Salud descarta riesgo sanitario mientras las partículas no bajen

Las autoridades sanitarias descartan, al menos de momento, riesgos para la salud derivados de la nube de ceniza que cubre Europa. La Dirección General de Salud Pública del departamento de Salud y el Ministerio de Sanidad aseguraron ayer que la altura a que se encuentran actualmente las cenizas lanzadas por el volcán islandés Eyjafjalljökull hace que, hoy por hoy, las partículas no representen ningún peligro sanitario. "Además, son partículas muy leves que están suspendidas y, a menos que llegaran a tierra, no hay riesgo para la salud", afirmó la ministra de Sanidad, Trinidad Jiménez. En este sentido, la ministra recordó que "no se ha previsto ningún plan internacional de prevención o reacción".

La Organización Mundial de Salud (OMS) ya alertó de que en caso de que la nube baje de la parte alta de la atmósfera y se produzcan concentraciones altas de ceniza en las capas más bajas, "las personas con enfermedades respiratorias, como asma, enfisema o bronquitis, podrían ser más susceptibles de sufrir irritaciones ".

Aunque la OMS admite que no puede predecir el alcance que puede llegar a alcanzar la situación, el portavoz de la organización, David Epstein, alertó de que si las partículas llegaran a la superficie terrestre "se recomendaría a las personas que se quedaran en casa en la medida de lo posible ".